Eskatón – En preproducción
“Eskaton” nace de la observación del comportamiento colectivo paraguayo, que no es muy diferente al de toda la región. Una población que proyecta sus esperanzas en figuras mesiánicas, como si ellas estuvieran dotadas de poderes casi “mágicos” para revertir sus males, olvidando que todos somos parte del problema y tenemos una responsabilidad qué ejercer en el devenir de la vida y sus soluciones. En nuestro contexto, es muy típico esperar que los demás hagan lo que nosotros no estamos dispuestos a hacer.
A modo de ejemplo; nos quejamos de los desagües pluviales trancados, pero no dejamos de arrojar desperdicios en ellos, entonces en épocas de lluvias torrenciales acabamos inundados todos en el barrio. A pesar de acabar nadando en el fango, la práctica no cesa y el mismo mal se repite una y otra vez cada temporada.
En esta historia, Cándido e Inocencia (dos inmejorables nombres para tan hermosos personajes) están motivados por nobles y genuinos ideales, pero acaban revueltos en el fango de un sistema que ellos no inventaron, pero les fagocita.
Inocencia hace de voz de la conciencia, le recuerda a Cándido de dónde vienen y dónde radica la belleza del ser humano. El amor de su vida, Cándido, se perderá en los laberintos de la futilidad, y no será hasta experimentar el dolor de su pérdida, que caerá en cuenta del rol para el que fue llamado.
Eskaton nos desnuda a todos los habitantes de este maravilloso suelo, y nos muestra el potencial que tenemos para construir una sociedad mejor.”